En una nota publicada el 13 de mayo de 2024, la Santa Sede explicó cómo obtener la Indulgencia Jubilar, concedida durante el Año Santo 2025, que se abrió el pasado 24 de diciembre y concluirá el 6 de enero de 2026.
Las indulgencias designan la remisión ante Dios de la pena temporal debida a los pecados ya perdonados en cuanto a la culpa, remisión que concede la Iglesia fuera del sacramento de la penitencia.
Hay dos tipos de indulgencias: la indulgencia plenaria, que remite toda la pena temporal debida al pecado, y la indulgencia parcial, que remite sólo una parte.
Es el Sumo Pontífice, a quien Nuestro Señor ha confiado el poder de dispensar todo el tesoro espiritual de la Iglesia, quien puede conceder y distribuir indulgencias, como pueden hacerlo todos aquellos a quienes el Sumo Pontífice ha concedido este poder.
Para obtener la indulgencia, hay que estar bautizado y no estar excomulgado, tener la intención de obtenerla realizando la obra prescrita, estar en estado de gracia y desprendido de todos los pecados veniales. Las indulgencias se obtienen para uno mismo o para las almas del purgatorio.
La nota publicada por la Penitenciaría Apostólica recuerda las condiciones habituales: “Los fieles verdaderamente arrepentidos, desprovistos de todo apego al pecado y animados por un espíritu de caridad, que durante el Año Santo, purificados por el sacramento de la penitencia y alimentados por la Santa Comunión, recen según las intenciones del Sumo Pontífice, obtendrán una indulgencia plenaria del tesoro de la Iglesia.”
Para obtener una indulgencia, los fieles deben realizar una peregrinación o un acto de penitencia o misericordia. Se recomienda una peregrinación a Roma. La Penitenciaría recomienda visitar las siete iglesias queridas por San Felipe Neri, pero también el Iter Europaeum, es decir, las iglesias nacionales europeas de Roma.
También se sugiere un itinerario dedicado a los grandes santos, que incluye Santa Maria sopra Minerva, Santa Brigida en Campo de’ Fiori, Santa Maria della Vittoria, Trinità dei Monti, Santa Cecilia en Trastevere y Sant’Agostino en Campo Marzio.
También se recomiendan las visitas al Santuario del Amor Divino, la iglesia de Santo Spirito in Sassia, santuario de la Divina Misericordia, la iglesia de San Paolo alle Tre Fontane, lugar del martirio de San Pablo, y las catacumbas cristianas.
Se invita a los fieles a seguir el ejemplo y el mandato de Cristo de redescubrir las obras corporales de misericordia, como dar de comer al hambriento, dar de beber al sediento, vestir al desnudo, acoger a los forasteros, cuidar a los enfermos, visitar a los presos y enterrar a los muertos.
Asimismo, se les anima a practicar obras de misericordia espiritual, como aconsejar a los que dudan, enseñar a los ignorantes, amonestar a los pecadores, consolar a los afligidos, perdonar las ofensas, soportar pacientemente a las personas problemáticas y rezar a Dios por los vivos y los muertos.
Con motivo del Año Santo, la Fraternidad San Pío X organizará una peregrinación internacional a Roma el 20 de agosto de 2025.
Fuente: FSSPX News